Construido en las primeras décadas del siglo XVIII, aprovechando el impulso de la Acequia de la Aljufía, junto al paraje denominado de los Canalaos de Rincón de Beniscornia se encontraba la antigua fábrica de la pólvora que hacía uso de la corriente de estas aguas para mover el gran molino con el que se picaba en los porteros la pólvora.
El Ayuntamiento de Murcia ha concluido la recuperación de esta infraestructura con un proyecto que fue consensuado con la Junta de Hacendados y con la colaboración de los propietarios de los terrenos privados, quienes autorizaron la realización de excavaciones y ofrecieron la parcela para su adecuación e integración funcional en la actuación arquitectónica y urbanística.
El proyecto
El proyecto integral desarrollado consistió en la recuperación y puesta en valor de los restos del propio molino, la restauración de los paños de piedra del entorno de la acequia de la Aljufía y la recuperación de sus quijeros. Igualmente, se llevó a cabo la excavación e integración de los restos del conjunto del antiguo molino y la creación y recuperación de un entorno natural que sirve de zona de estancia y mirador para contemplar y dar a conocer el conjunto. Así, se ejecutó la construcción de un mirador-escenario que permitirá la contemplación de la acequia, a la vez que podrá ser utilizado como zona de estancia. Además se han inventariado las especies botánicas existentes para realizar una recuperación naturalizada del recinto delimitado por un canal de bypass que formaba parte del funcionamiento del antiguo molino acotando así la zona de intervención y recuperación.
Actualmente
Se conservan tres canales de impulsión, el aliviadero y un canal auxiliar (conocido como brazal del Pavón), además del pantano o regolfo. Los tres canales principales están separados por tajamares de sillería con sus respectivos portillos con brencas de arenisca.
Antes de la ejecución del proyecto de rehabilitación, se llevó a cabo una actuación con el fin de verificar la conservación de restos de carácter industrial en el subsuelo. El sondeo practicado en la zona inmediata a la rueda vertical, donde teóricamente debía ubicarse la denominada sala de pica, descubrió nuevos canales que permanecían ocultos, muros de ladrillo macizo que delimitan un gran espacio de trabajo y pavimentos de ladrillo asociados a dicho ámbito.
Dentro del área de trabajo documentada, se aprecia un gran zócalo longitudinal parcialmente destruido, junto al que se localizan diversas piezas de madera carbonizadas, entre las que se distingue un doble madero y diversas piezas cilíndricas de corte biselado, que se identifican con la maquinaria y con posibles utensilios empleados en la manipulación de la pasta húmeda de pólvora.
Por otra parte, se constata que los muros se extienden a ambos lados del sondeo, por lo que es previsible que se conserve la planta completa del edificio que, en principio y con las debidas reservas, se pueden identificar con una de las dependencias del molino donde se fabricaba la pólvora, sin descartar que este mismo espacio fuera reutilizado en parte por el batán posterior.
Así, estas excavaciones arqueológicas previas a la ejecución de las previsiones del proyecto, autorizadas por la Dirección General de Bienes Culturales,confirmaron las suposiciones iniciales de la existencia de un importante complejo de fabricación de pólvora, anterior a la famosa Fábrica de la Ñora. Estos restos se van a proteger e integrar en el proyecto definitivo una vez se disponga de la propiedad del terreno.
Hay que recordar que la Concejalía de Desarrollo Sostenible y Huerta está inmersa en un ambicioso plan de recuperación de patrimonio de los molinos sobre las acequias, en el cual se incluyó el del Molino de la Pólvora, que tienen unas características que lo hacen singular, tanto por su destino y uso, como por su interesante entorno paisajístico.
Autores del Proyecto: Santa+Cruz Arquitectos
Dirección y coordinación: Subdirección Técnica-Huerta, Concejalía de Desarrollo Sostenible y Huerta.
Aquí podéis consultar los paneles resumen de la intervención: